Sensibilizan a mujeres tamaulipecas sobre el abuso en el consumo del alcohol.

Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Con acciones de sensibilización entre la sociedad sobre el abuso del alcohol y la difusión de sus programas de prevención, tratamiento y rehabilitación, el Gobierno de Tamaulipas a través de la Secretaría de Salud puso en marcha las actividades de la Semana Nacional Compartiendo Esfuerzos.

En coordinación con el grupo Alcohólicos Anónimos (AA) y bajo el lema 2020 “El alcoholismo en la mujer: Una verdad oculta”, del 27 de enero al 02 de febrero se llevan a cabo conferencias, sesiones y pláticas de orientación en más 100 módulos instalados en hospitales, dependencias gubernamentales y escuelas de las 12 jurisdicciones sanitarias del estado.

El uso de alcohol es el principal problema de consumo en México y afecta especialmente a los adolescentes y aunque los hombres lo consumen más, las mujeres presentan un importante índice de consumo.

A la fecha se han atendido en las diferentes unidades médicas del estado a 198 mujeres.

En tanto, la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2018 publicada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, revela que 18.7 por ciento de los tamaulipecos de 10 a 19 años consume alcohol y un 16.4 por ciento de la población de 20 años en adelante.

Para hacer frente a este serio problema de salud pública, el sistema estatal de salud cuenta con una red de servicios consistente en 18 Centros de Atención Primaria en Adicciones (UNEME CAPA); localizados en Ciudad Victoria, Soto la Marina, Hidalgo, Tampico, Madero, Altamira, Matamoros, Valle Hermoso, 3 en Reynosa, Rio Bravo, 2 en Nuevo Laredo, Miguel Alemán, San Fernando y Jaumave.

Además cuenta con el centro de tratamiento y rehabilitación “Renacer” ubicado en el ejido La Misión, en Ciudad Victoria y 6 centros de internamiento de adicciones pertenecientes a organismos de la sociedad civil.

Durante la ceremonia inaugural se estableció que las adicciones son un problema grave de salud pública y hacer prevención en ellas, implica un compromiso de esfuerzos compartidos y de coordinación interinstitucional, para contar con una estrategia orientada a fortalecer los factores de riesgo y desarrollar estilos de vida saludables.